Título: Romeo y Julieta
Saga: -
Autor/a(es): William Shakespeare
Editorial: Vicens Vives
Nº pág.: 208
Precio I.V.A: 11,65€
Colaboración: -
The two young lads, Romeo and Juliet, met at a masquerade ball and there began a passionate love for one another. The rivalry that their respective families have had for each other for a long time make this love an impossible one, one that can only end in tragedy.
Soy una de las personas que siempre dice que antes de morir, una lectora ha de leer todos esos clásicos que revolucionaron este mundo hoy en día. Pero claro está, hay ciertas comparaciones que debemos de dejar a parte una vez empezamos con este tipo de libros, sino, no los podremos disfrutar.
No sé si solo es mi caso o no, pero me sentí un poco defraudada ante esta historia. William Shakespeare, siempre ha sido uno de los autores ingleses que más he tenido respeto, desde que la literatura lo es todo para mí. Y tras terminar esta obra, me quedé con un sabor amargo en la boca.
Es verdad que los clásicos en sí ya reciben mucho hype por simplemente ser lo que son, pero en este caso, ese ''hype'' me ha estropeado la lectura. Sabía de antelación (Como la mayoría de los lectores que leen esta obra) de qué trataba, y como terminaba. Me hizo recordar muchísimo a ''Alicia en el país de las maravillas'', ya que terminé con la misma sensación, sólo que un poco mejor, ya que por
suerte, Romeo no está ''tan loco''.
Al tratarse de una obra teatral en este caso, no hay narrador. Los personajes son los propios narradores, protagonistas de cada una de las escenas, y los que aportan los sentimientos al público. Creo que esa fue una de las cosas que eché de menos: Transmitir al público lo que sienten. Es verdad que a través de tales palabras, súplicas, podíamos darnos cuenta de lo mal que lo estaban pasando, pero a veces me resultó irrelevante. Incluso demasiado. Con este tipo de tramas suelo llorar a mediados, o me hundo en las lágrimas al final. Pero no fue así, y me decepcionó. El tema principal de esta obra, es saber que el amor lo es todo, vence a la muerte, y es capaz de cambiar el destino para estar al lado de la persona que uno quiere, tanto en la tierra como en el cielo. Shakespeare nos quiso demostrar que después de la muerte de ambos hijos por parte de esas dos familias tan odiadas, pudo haber una pequeña conciliación al final.
Si seguimos hablando de amor, he de decir que no me gustó demasiado ese flechazo que Cupido le dio a Romeo y a Julieta en tan solo una vez que se vieron. Pensé varias veces sobre esto, hasta que me di cuenta de que en aquella época, era de lo más normal. Las personas no vivían mucho, y desde pequeñas las mujeres nobles eran obligadas a casarse, pero casi siempre con personas que no querían, y por pura obligación de sus padres para mantener la reputación, y el dinero con el cabo de los años.
Vamos a profundizar un poco más en los personajes. Quiero hablaros justamente de uno que me llamó muchísimo la atención: Fray Lorenzo. Él ya sabiendo que hacía mal al aceptar la petición de Romeo, lo hizo. Y tras hacerlo, siguió cometiendo más errores hasta terminar con aquel final trágico que todos sabemos en la historia. Este Fray, no es como los demás. No simplemente decide obedecer lo que sus superiores dicen, o lo que es bueno para la Iglesia. Comienza a pensar por sí mismo, y eso es una gran evolución. Después también puedo destacar a la Nodriza de Julieta. Una mujer que a pesar de la época en la que se situaba, y todas las barbaridades que le decían, seguía manteniéndose firme ante sus pensamientos, y dando buenos consejos a Julieta. Pero esta última, era muy testaruda. ¿Perseguir el amor hasta la muerte? Me gustaría ver a alguien de hoy en día que hiciera lo mismo que esta trágica pareja de amantes. Y como no podría faltar, un padre autoritario, machista, y por qué no decirlo, tonto.
Durante la mayor parte de la obra se menciona connotaciones obscenas por el lenguaje de los primos de ambas familias: Los Montesco (Romeo) y los Capuleto (Julieta). Otra de las cosas que estos personajes (Teobaldo, Benvolio, Mencucio...) hacían y me irritaba un poco, era llevar a todo hacia la pelea física (Exceptuando a uno). Si hubiera descripciones de sus acciones, sería algo mucho más llevadero. Pero tanta habladuría a veces cansa. Por no decir después la capacidad de la bipolaridad de todos los personajes. Eran muy manipulables.
El soborno para ellos, es como el agua para nosotros. Y por último me gustaría destacar los increíbles avances y retrocesos en el tiempo. Me hizo mucha gracia que el autor quisiera acelerar el tiempo de la forma más fácil posible (Me refiero, poniendo ya en la siguiente línea que ha llegado la noche, cuando en la anterior, acababa de salir por la madrugada), para que la gente no esperase tanto el momento final que todos querían ver. Al tratarse de una obra de teatro, si nos lo imaginamos, tiene mucho sentido, y es algo muy factible para los espectadores.
Gracias a mi profesora de Literatura Universal me atreví con este clásico. Iba a empezar otro del mismo autor, pero no sabía cómo iba a terminar mis gustos ante su pluma. Y al parecer, eso ha sido algo que me ha verdaderamente enganchado, y que no me puedo quejar en absoluto. A todas esas personas que queréis empezar a leer clásicos, creo que este sería uno muy bueno ya que: Tiene una trama sencilla y llevadera, una historia interesante, y unos personajes que a veces te ríes ante sus ocurrencias o palabrerías.